Después del asesinato de 10 músicos indígenas en una comunidad de Chilapa, Guerrero, la Policía Comunitaria decidió comenzar el adiestramiento de uso de armas de casi 20 niños de entre seis y quince años de edad para defender a su pueblo.
Ayer por la tarde marcharon en la comunidad de Alcozacán los 19 niños que reciben el entrenamiento para combatir.
Según el coordinador de la Policía Comunitaria, Bernardino Sánchez, los niños reciben entrenamiento desde hace dos meses para defenderse de los ataques del presunto grupo criminal Los Ardillos, aunque añadió que no realizarán labores de la policía.
Esto lo realizan ante la falta de respuesta de las autoridades estatales y federales.