La Comisión Nacional de Sanidad del Gobierno Chino informó que comenzaron a implementar unas pruebas rápidas de COVID-19 diferentes, ya que los fluidos que se recogen para analizar se toman del ano de las personas. Aseguran que estos resultados son aún más precisos que los de los test que se aplican en la nariz.
Según un medio de comunicación chino, estas pruebas se aplican en barrios de Pekín donde se han confirmado rebrotes de COVID-19. Asimismo se explicó que el proceso de toma de muestra es el mismo que el realizado en las fosas nasales, con la diferencia de que el hisopo se inserta en el ano.
“Teniendo en cuenta que la recolección de hisopos anales no es tan cómoda como la de los hisopos de garganta, puede ser una buena opción en grupos clave, como los de aquellas personas que estén en cuarentena”.Especialista médico Chino
En redes sociales, la creación de este nuevo método de prueba ha generado controversia, sobre todo entre quienes ya lo sufrieron y aseguran haberse sentido avergonzados, por lo que no se espera se aplique a nivel mundial como las pruebas que consisten en insertar un hisopo en la nariz.