“Me están siguiendo”, ese fue el último mensaje de texto que una joven de 16 años envió a sus conocidos para advertir lo que estaba pasando, y adjuntó una foto del individuo que según ella la estaba acosando. La menor de edad fue identificada como Karina “N”, cuyo cuerpo fue encontrado horas más tarde en el río de Cáchira, Colombia.
Este caso de feminicidio estremeció a la comunidad colombiana, luego de que la mañana del pasado martes, Karina Blanco, una joven de 16 años, fue violada y posteriormente asesinada mientras se desplazaba hacia su escuela en el municipio de El Playón. De acuerdo con los familiares, la menor les reportó a través de WhatsApp que un hombre la perseguía. Luego, desapareció.
“La niña fue abusada y la apuñalaron en el pecho, en un brazo y el mentón, solo era una niña que iba a estudiar y por culpa de un desadaptado hoy está muerta”, informó un socorrista.
La joven fue encontrada horas más sin vida por cuerpos de rescate en el río Cáchira y, por la fotografía que había enviado minutos antes a su familia, la comunidad logró identificar al presunto responsable de este atroz hecho. Tras dar con el individuo, este confesó el crimen y luego fue golpeado y atacado con arma blanca hasta morir a manos de la comunidad.
Posteriormente, el hombre fue identificado como Alexander Carrillo, un migrante venezolano de 55 años de edad, quien fue descubierto en una vereda de la zona gracias a fotografías enviadas por la menor antes de ser raptada.
De acuerdo con los primeros reportes, la menor ya había reportado a unas amigas que un hombre la seguía desde hace días.
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