El incremento al precio del combustible el día de Año Nuevo, ha generado conflictos en Kazajistán, por lo que manifestantes salieron a las calles a mostrar su inconformidad y es así que asaltaron e incendiaron edificios públicos.
Decenas de manifestantes han muerto y mas de mil han resultado heridos como resultado de la represión.
Además, como consecuencia de la revuelta, el Ministerio de Salud indicó que hay 62 personas en terapia intensiva y 13 policías muertos, dos de los cuales fueron decapitados.
Cabe señalar que ante el caos, Vladimir Putin y sus aliados de la Organización de Tratado de Seguridad Colectiva (OTSC) ya han enviado paracaidistas a Kazajistán como parte de una fuerza calificada de mantenimiento de la paz.