El joven de 22 años, Norberto Ronquillo, fue asesinado la misma noche que lo secuestraron. Su familia ya había pagado 500 mil pesos por el rescate, pero eso no impidió que los secuestradores lo torturaran y asesinaran.
Tal como ya se ha comentado en este medio, Norberto murió de asfixia por estrangulamiento, su cuerpo tenía huellas de tortura y varios golpes en la cara, así como la nariz rota.
Todo indica, según las autoridades, que Norberto fue asesinado la misma noche que lo secuestraron.
La Procuradora General de la Ciudad de México dijo que su secuestro fue “atípico”, ya que resulta extraño que 10 minutos después de su salida de la universidad se reportara su secuestro a las autoridades.
Nuestro corazón está puesto para que este hecho no quede impune, señalaron autoridades capitalinas.