Tras haber trascendido en redes sociales durante el fin de semana la desaparición de 22 migrantes que viajaban por Tamaulipas en un autobús de la línea Transpais que se dirigía a Reynosa, fue hasta el día de ayer cuando el gobierno panista de Francisco García Cabeza de Vaca, informó y admitió los hechos ocurridos desde el jueves pasado.
Información de la central de autobuses de Reynosa, señala que fue un peligro el no alertar sobre este hecho, ya que diariamente alrededor de 38 camiones recorren esta vía (San Fernando).
Transpaís, empresa dueña del autobús donde ocurrió el secuestro, dijo que siguió los protocolos necesarios y realizaron la denuncia correspondiente horas después, por lo que no entienden porqué el caso se ocultó más de 4 días.
Fuentes que cita el periódico Reforma indican que el narcotráfico en la zona noreste de México ya no deja las mismas ganancias que antes, por lo que “el negocio de moda” es el secuestro de migrantes que cruzan por la zona rumbo a los Estados Unidos.
Al tratarse de migrantes, no existen hasta el momento denuncias en México, situación que complica más la identificación de los pasajeros que fueron bajados del autobús que cubría la ruta Tampico – Reynosa.