La NASA, en colaboración con agencias espaciales europeas y canadienses, ha logrado capturar una imagen extraordinaria del agujero negro RX J1131-1231 utilizando el potente telescopio James Webb.
Situado a 6000 millones de años luz en la constelación Cráter, este agujero negro ha revelado detalles impresionantes sobre la naturaleza del cosmos.Lo más destacado de esta imagen es el cuásar de fondo amplificado por la lente gravitacional de una galaxia cercana, predicha por la teoría de la relatividad de Einstein.
Esta distorsión crea un fenómeno visual impresionante: un arco luminoso y cuatro imágenes del cuásar. Además de la estructura detallada del agujero negro central, que gira a velocidades sorprendentes cercanas a la mitad de la velocidad de la luz, el descubrimiento ofrece pistas sobre cómo estos gigantes cósmicos pueden crecer a través de fusiones galácticas.
El Telescopio Espacial James Webb utilizó su instrumento MIRI de infrarrojo medio para capturar esta imagen histórica, como parte de un programa destinado a estudiar la materia oscura, invisible a los métodos tradicionales de detección pero constituyente fundamental del universo.
