En la comunidad de San Francisco Tepeyac, perteneciente al municipio de San Martín Texmelucan en Puebla, se ideó una nueva forma de continuar la tradición del Día de la Candelaria y respetar las medidas sanitarias para evitar el COVID-19.
Las autoridades eclesiásticas locales pidieron a los feligreses llevar sus imágenes de Niño Dios al templo desde un día antes para “sentarlos” en las bancas y así estas figuras pudieran recibir la bendición del sacerdote, ritual que se hace normalmente con la presencia de las personas que portan la imagen religiosa en las manos mientras escuchan misa.
Uno a uno lo fieles entraron a la iglesia para dejar a su Niño Dios en la banca. Cada uno de estos iba etiquetado con el nombre del dueño para evitar pérdidas. Además se compartieron imágenes en redes sociales para informar a los feligreses sobre el acomodo de las figuras.
Una vez terminada la misa, se pidió a los dueños de los Niños Dios, que iban vestidos perfectamente para la ocasión, pasaran a recogerlos, siempre respetando las medidas de sana distancia y limpieza.