Al menos 500 murciélagos fueron quemados vivos por los mismos pobladores de una provincia en Cajamarca, Perú, por miedo a que los infectaran de coronavirus.
Lamentablemente la desinformación sobre los contagios de COVID-19, y los rumores de que estas especies transmiten el virus a los seres humanos, provocó que los habitantes salieran con antorchas a una cueva de la localidad donde habitan cientos de murciélagos.
Los animales lograron huir a tiempo, pero se refugiaron en la construcción de una escuela, donde la gente aprovechó para prenderles fuego.
Por ello tuvo que intervenir el Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (Serfor) en Perú, quienes informaron que se rescataron a cerca de 200 ejemplares, pero 300 murieron.
Jessica Gálvez – Durand, directora de la dependencia, explicó que los murciélagos son de gran importancia para la naturaleza, pues se encargan de dispersar las semillas y combatir plagas, por lo cual es importante protegerlos.
Hizo un llamado para que, si los quieren ahuyentar, solo basta con poner luz, no es necesario matarlos, pues se afecta directamente al equilibrio del ecosistema.
[Cajamarca]Personal del @serforperu del @minagriperu, y municipalidad provincial liberan en una cueva alejada de la población a 200 murciélagos rescatados del ataque de la población en un caserío en Catache. ¡Los murciélagos son aliados en la conservación de nuestros bosques!???????? pic.twitter.com/yt4P5Ca39S
— Serfor Perú (@SerforPeru) March 25, 2020
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